Lleva unos meses en la manufactura, pero Ilaria Resta ya empieza a demostrar su estilo al frente de Audemars Piguet: “Cuando llegué, no tenía muy claro el trabajo detrás de las complicaciones, pero cuando descubres lo que se oculta en cada una de ellas te das cuenta de que son una obra de arte. Esta es la magia y me fascina todo lo que se registra alrededor del metier d’art”. Y tiene claro algo más, sobre todo cuando tanto se habla ya de Inteligencia Artificial y el futuro: “Nuestro objetivo es sorprender a los clientes, traer lo inesperado… Y las mejores ideas provienen del corazón, no de los datos acumulados”.
> ¿Y cuál de las novedades presentadas por AP es la preferida de Ilaria Resta?
Es difícil, porque es un poco como preferir a un hijo sobre otro. Pero debo decir que el QPS de John Mayer (el Royal Oak Calendario Perpetuo Estelar), porque tiene una historia especial en este programa de innovación que marca estos primeros seis meses del año y porque también es el final de un calibre que ha sido una gran parte de la historia de Audemars Piguet. Pero el próximo año, como parte del 150 aniversario, habrá muchas más sorpresas. Y por supuesto, mi corazón late por la relojería suiza.
¿Cómo ha sido su inmersión en Audemars Piguet estos últimos meses?
Extremadamente intensa, pero muy positiva. Antes de tomar las riendas he querido visitar las diferentes regiones, las boutiques, las AP House…, para tener una visión del mundo Audemars Piguet. Pero comenzamos realmente desde el taller y la fabricación. Ahí es donde transcurrieron mis primeros dos meses, y ver de primera mano la creación de un reloj, que es, por supuesto, el área que requiere más observación y aprendizaje. Y tuve mucha suerte de que el equipo dedicara su tiempo a educarme y transmitirme la pasión.
> ¿Cuál es el mejor valor que posee la marca?
La insatisfacción saludable con el statu quo.
> Es algo bueno…
Sí, es bueno porque es humilde. Te sitúa en una posición de querer hacer más todo el tiempo. Y también te empuja a innovar. Porque no se trata solo de relojería; también incluso en la fabricación de materiales. Mire lo que representa, por ejemplo, la nueva combinación de oros, como el Sand Gold, materiales como el camuflaje… Ahí fuera hay más cosas que quiero descubrir.
> Al final, la innovación siempre está presente en los mensajes de AP.
Siempre. Y no se establece como una medida; no decimos, “ok, necesitamos innovar tantas veces al año”. De hecho, hay años muy prolíficos. Lo que fomentamos son las ideas, creamos un ambiente donde pueden surgir de cualquier parte de la empresa o del exterior, de nuestros socios. Y cuando las ideas llegan, nunca sabes cuándo las pones a prueba ni su factibilidad, y de repente, logramos resolver cómo hacerlo y lanzamos la innovación.
> Usted tiene experiencia en el universo premium, pero ¿cuál será su aportación y cómo se traduce en una marca de relojería como Audemars Piguet?
Diría que la parte de la experiencia… Acabamos de empezar a explorar la oportunidad de la experiencia que podemos ofrecer a nuestros clientes y a los que no lo son. Un ejemplo lo tenemos en el modelo del laboratorio de AP en Japón: soy una firme creyente del formato educativo y, al mismo tiempo, entretenido e interconectado para expandir la marca. Porque mi misión es realmente abrir las puertas a los clientes, ser sus prescriptores, pero también dejar pasar a personas interesadas en la relojería. La relojería no significa ser exclusiva; es por eso que la palabra lujo a veces es engañosa, porque parece que estás excluido de compartir y abrir las puertas a otros.
> Si tuviéramos que definir con una palabra el espíritu de AP, ¿cuál de estas tres sería: pasión, emoción o experiencia?
Es experiencia. Además, agregaría un espíritu ingenioso, con una manera no convencional de hacer las cosas y hablar de ello sin tomarnos demasiado en serio. Este sentido del humor innato que tenemos, y el hecho de que algunos relojes también representan una sorpresa inesperada, es lo que nos permite afirmar que nunca hay que dar nada por sentado.
> Hablemos de Inteligencia Artificial. ¿Cómo cree que podría mejorar a una marca como Audemars Piguet? ¿Cuál es la forma en que la Inteligencia Artificial podría ser adoptada en las marcas de lujo?
Esa es una pregunta muy buena e interesante. En primer lugar, la primera base de la Inteligencia Artificial es registrar y etiquetar datos con precisión. Así que lo que estamos haciendo es realmente organizar y registrar datos sobre nuestra producción e ideas que tenemos relacionadas con las tendencias de preferencia del consumidor. Esta riqueza de datos nos ayudará algún día a guiar mejor nuestras decisiones. Sueño con optimizar la forma en que producimos. También necesitamos utilizar datos para rastrear ESG y nuestras emisiones de CO2 y nuestro impacto en el medio ambiente. Otra cosa es la experiencia. Los clientes quieren soluciones más y más personalizadas. Si conocemos a los clientes al dedillo, sus necesidades, su familia, lo que quieren, podemos ayudarles mejor en todo lo que hacemos. Así que creo que, en esta etapa, aún no sabemos cómo podemos usar activamente la Inteligencia Artificial para apoyar nuestras operaciones o nuestra innovación. Pero definitivamente algún día en el comercio minorista, en la fabricación, en la innovación, lo haremos. Ciertamente, muchas pruebas en productos y cronometría pueden hacerse a través de la Inteligencia Artificial. Así que hay simulaciones que pueden ayudarnos a alcanzar el nivel de confianza de nuestros productos en el futuro. Estoy deseando ver cómo se utiliza.