La alta relojería y Louis Vuitton viven un idilio creativo con ciertos toques de transgresión –en el buen sentido de la palabra–. Y de forma especial, en este ejercicio. El Tambour Moon Flying Tourbillon ‘Poinçon de Genève’ Sapphire es una nueva ilustración de la experiencia relojera atesorada por Louis Vuitton. Como su propio nombre indica, este nuevo Tambour cuenta con una caja totalmente elaborada con un bloque de zafiro. Pero hay algo más importante: es la primera vez en la historia de la relojería que una creación de este tipo luce el sello de Ginebra.
El Tambour Moon Flying Tourbillon ‘Poinçon de Genève’ Sapphire muestra el excelente trabajo de La Fabrique du Temps Louis Vuitton en esa búsqueda constante de la innovación. En la actualidad, el taller explora el corindón sintético, un zafiro puro obtenido mediante la transformación del óxido de aluminio a temperaturas muy elevadas (más de 2.000°C). En la realización de cada pieza, los ingenieros de La Fabrique du Temps Louis Vuitton han extraído las piezas de un mismo bloque para garantizar la uniformidad en el color. Para hacerse una idea de lo delicado del trabajo, en obtener el centro de caja, el fondo y el puente con las letras LV, se emplean 250, 110 y 60 horas respectivamente.
En la parte mecánica, monta un movimiento de cuerda manual que desarrolla una autonomía de 80 horas y da vida a un tourbillon volante integrado en una jaula en forma de delicada flor Monogram.